Lavado de cerebro

El Lavado de cerebro, también conocido como reforma del pensamiento, "educación" o re-educación, es la aplicación de técnicas coercitivas o no, para cambiar las creencias, conducta, pensamiento y comportamiento de un individuo o más personas, con propósitos políticos, religiosos o cualquier otro, al grado que sugiere el termino “lavado de cerebro”.

A lo largo de la Historia, se ha recurrido a diversas formas de control del pensamiento de los individuos pero han sido las sociedades totalitarias del siglo XX las que primero han aplicado conocimientos cientificos para mejorar las tecnicas de lavado de cerebro, y hoy en día se aplica como metodo de curación en psiquiatría, apoyado frecuentemente con el uso de fármacos que inhiben las capacidades cognitivas del paciente.

Otros apoyos empleados secularmente en el lavado de cerebro, son el hambre y la privación de proteinas, que producen confusión y credulidad en la capacidad de raciocinio y la privación del sueño que causa estres y confusión.

Supuestamente en 30 días se consigue un lavado de cerebro y aunque ninguna programación es irreversible, si el individuo la acepta durante un periodo de tiempo considerable, ya no hay vuelta atras, como se ve en los adeptos de diversos credos y filosofías. Cuando no se cree realmente en el proyecto, el programa al que se somete al subconsciente es equivoco, flojo, y a veces contradictorio. Los resultados serán la imagen misma de su programación.

George Orwell en su novela 1984 describió varias tecnicas usadas entonces en el lavado de cerebro.