Cecil John Rhodes (Bishop's Stortford, Hertfordshire, 5 de julio de 1853 – Groote Schuur, 26 de marzo de 1902) fue un empresario, colonizador y político británico, fundador de la compañía De Beers y colonizador del país que, a su muerte, llevaría su nombre: Rhodesia (actuales Zambia y Zimbabwe).
Quinto hijo de Francis William Rhodes y de su segunda mujer, Louisa Peacock. Como pastor de la iglesia de Inglaterra, su padre servía en la parroquia de Brentwood, Essex durante quince años, hasta 1849 cuando se convierte en el vicario del obispado de Stortford, donde permanece hasta 1876. Rhodes tuvo nueve hermanos y dos hermanas y acudió a la escuela del obispado de Stortford, debido a una enfermedad que le afectó a los pulmones fue a vivir con un hermano a Natal, donde llegó el 1 de septiembre de 1870.
Llevaba 3.000 libras de su tío con la idea de cultivar algodón, pero al conocer el descubrimiento en julio de 1871 de un rico yacimiento en una granja llamada De Beers en Kimberley se trasladó allí e invertió el dinero en licencias para la explotación de la mina de diamantes, asociándose con John X. Merriman y C. D. Rudd, que más tarde también le acompañarían en la fundación de De Beers Mining Company.
En 1872 Rhodes sufrió un ataque al corazón, pero se recuperó, pero también para investigar las posibilidades de descubrir oro en el interior, los hermanos Rhodes marchan al norte, llegando hasta Mafeking y Murchison. En 1873, al anunciarse que la mina más rica de Kimberly estaba agotada, Rhodes se hizo con todas las licencias que le ofrecieron y se hizo rico al descubrirse más capas de diamantes debajo, que dejó al cuidado de su socio, Rudd, y vuelve a Inglaterra para completar sus estudios, admitido en el Oriel College, sólo estará por un curso, y no vuelve hasta 1876. Influido por el discurso inaugural de John Ruskin, que refuerza su entrega a la causa del imperialismo británico.
Rhodes decide entrar en política, y en 1880 se presenta para la Asamblea del Cabo por Barkley West, un distrito rural con mayoría de votos boers, pero consigue ser elegido. La principal preocupación del Parlamento del Cabo cuando Rhodes entra era el futuro de Basutolandia, donde el ministro Gordon Sprigg intentaba restaurar el orden después de una rebelión provocada por política de desarmar a los basutos. En 1886 al descubrirse oro en Johanesburgo Rhodes acaparó buena parte de las concesiones. En 1890 Rhodes se convirtió en el primer ministro de la Colonia del Cabo y promulgó leyes para beneficiar a los propietarios de minas e industrias, y por la ley Glen Grey favorecía la expulsión de los negros de sus tierras para favorecer el desarrollo industrial. La política de Rhodes propició la consolidación del colonialismo británico en Sudáfrica, y entró en conflicto con la República Bóer del Transvaal que ambicionaba. En 1895 Rhodes apoyó un ataque sobre el Transvaal, el Jameson Raid, que fracasó e hizo que Rhodes dimitiera como primer ministro.
Rhodes también usó su fortuna, la primera del mundo en su tiempo, para conseguir su sueño de expandir el imperio británico por África, utilizó la fuerza de la guardia de su Compañía Británica de África del Sur, fundada en 1890, para colonizar con granjeros blancos Mashonaland, en el actual Zimbabwe. Rhodes también fue esencial en la construcción del ferrocarril del Cabo al Cairo.
Ayuda a Robert Baden-Powell a llegar a Ciudad del Cabo durante sus campañas militares en África.