Arquitectura gótica

El gótico es un estilo arquitectónico que se desarrolló durante los siglos XII al XV de la Edad Media y que ponía especial énfasis en la ligereza estructural y la iluminación de las naves del interior del edificio, y que surgió en contraposición a la masividad y la deficiente iluminación interior de las iglesias románicas. Se desarrolló fundamentalmente en la arquitectura eclesiástica: catedrales, monasterios e iglesias.

La palabra gótico viene de "Godo" en sentido peyorativo; es el despectivo nombre que dio Vasari (1511-1574) a este estilo medieval y fue propagado por los renacentistas italianos, que sólo consideraban arte a la antigüedad clásica. La arquitectura gótica tuvo su origen en Francia y se difundió a través de sus catedrales, principalmente al Sacro Imperio Romano Germánico y a la Corona de Castilla. En Inglaterra también penetró el estilo francés, aunque pronto adquirió un fuerte carácter nacional. En Italia no tuvo mucha aceptación, y su impacto fue muy desigual en las distintas regiones, llegó tarde y muy pronto fue sustituido por el Renacimiento.