Un iceberg o témpano de hielo es una isla de hielo procedente de la fragmentación de hielo polar, que siempre procede de los continentes y que es arrastrada hacia latitudes más bajas, a veces ayudadas por las corrientes marinas frías de origen ártico, como es el caso de la Corriente del Labrador o de Groenlandia. De un iceberg sobresale del agua sólo una octava parte su volumen total, por lo que estas masas gélidas constituyen un peligro para la navegación, ya que pueden alcanzar dimensiones enormes.